¿Cómo puedes cuidarte en casa?
No coma demasiada azúcar, grasas o comidas rápidas. Todavía puede comer postre y golosinas de vez en cuando. El objetivo es la moderación. Empiece poco a poco para mejorar sus hábitos alimenticios. Preste atención al tamaño de las porciones, beba menos jugo y gaseosas y coma más frutas y verduras. Consuma una cantidad saludable de alimentos. Una porción de carne de 3 onzas, por ejemplo, es aproximadamente del tamaño de una baraja de cartas. Llene el resto de su plato con verduras y cereales integrales. Limite la cantidad de refrescos y bebidas deportivas que toma todos los días. Beba más agua cuando tenga sed. Consuma al menos 5 porciones de frutas y verduras todos los días. Puede parecer mucho, pero no es difícil alcanzar este objetivo. Una porción o ración es 1 pieza de fruta, 1 taza de vegetales o 2 tazas de vegetales de hojas crudos. Coma una manzana o palitos de zanahoria como merienda en lugar de una barra de chocolate. Trate de tener frutas y / o verduras en cada comida. Haga del ejercicio parte de su rutina diaria. Es posible que desee comenzar con actividades simples, como caminar, andar en bicicleta o nadar lentamente. Intente estar activo de 30 a 60 minutos todos los días. No es necesario hacer todos los 30 a 60 minutos de una vez. Por ejemplo, puede hacer ejercicio 3 veces al día durante 10 o 20 minutos. El ejercicio moderado es seguro para la mayoría de las personas, pero siempre es una buena idea hablar con su médico antes de comenzar un programa de ejercicios. Corte el césped, trabaje en el jardín o limpie su casa. Utilice las escaleras en lugar del ascensor en el trabajo. Si fuma, deje de hacerlo. Las personas que fuman tienen un mayor riesgo de sufrir un ataque cardíaco, un derrame cerebral, cáncer y otras enfermedades pulmonares. Dejar de fumar es difícil, pero hay formas de aumentar sus posibilidades de dejar de fumar para siempre. Use chicles, parches o pastillas de nicotina. Pregúntele a su médico acerca de los programas y medicamentos para dejar de fumar. Siga intentándolo. En el futuro, notará algunos beneficios poco después de dejar de consumir tabaco. Si tiene dificultad para respirar o síntomas de asma, es probable que mejoren unas pocas semanas después de dejar de fumar. Limite la cantidad de alcohol que bebe. Cantidades moderadas de alcohol (hasta 2 tragos al día para los hombres, 1 trago al día para las mujeres) están bien. Pero beber demasiado puede provocar problemas hepáticos, presión arterial alta y otros problemas de salud. La atención de seguimiento es una parte clave de su tratamiento y seguridad. Asegúrese de programar y asistir a todas las citas y de llamar a su médico si tiene problemas. También es una buena idea conocer los resultados de sus pruebas y mantener una lista de los medicamentos que toma.
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